Buñuelos de Calabacín con Salsa de Yogur

Ingredientes:

4 Raciones

2-3 calabacines con un peso total de aproximadamente 400 gr.
1 diente de ajo pelado y majado*
3 cebolletas cortadas en láminas finas
125 gr. de queso Feta* (peso escurrido) desmenuzado
2 cucharadas de perejil fresco picado
2 cucharadas de menta fresca picada
1 cucharada de eneldo seco
1/2 cucharadita de nuez moscada
2 cucharadas de harina
pimienta
2 huevos
2 cucharadas de aceite de oliva

Para la Salsa de Yogur:
250 gr. de yogur griego (u otro que sea muy cremoso)
1/4 de pepino cortado en daditos
1 cucharada de eneldo seco
pimienta

Rallamos gruesos los calabacines sobre papel de cocina y cubrimos con más papel. Los secamos bien y dejamos reposar 10 minutos.

Mientras tanto, preparamos la salsa: mezclamos en un bol el yogur, el pepino, el eneldo y la pimienta; tapamos el bol y lo reservamos en el frigorífico.

Colocamos el calabacín rallado en un cuenco. Agregamos el ajo, la cebolleta, el queso, las hierbas picadas, el eneldo, la nuez moscada, la harina y pimienta al gusto. Batimos los huevos en otro bol y los incorporamos a la mezcla de calabacín. Removemos todo bien, teniendo en cuenta que es importante que nos quede grumosa y desigual (aunque normalmente debamos conseguir lo contrario, esta preparación queda mucho mejor y más gustosa si NO la dejamos homogénea).

Calentamos el aceite en una sartén de base ancha, a fuego medio. Echamos 4 cucharadas de la mezcla de calabacín en la sartén, distanciándolas entre sí. Doramos los buñuelos resultantes durante 2-3 minutos por cada lado. Los sacamos y dejamos escurrir en papel de cocina, manteniéndolos calientes.

Freímos la segunda tanda del mismo modo (deberían salir en total 8 buñuelos).

Servimos los buñuelos calientes y acompañados por la salsa de yogur.